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Manteros de Once y Flores

Manteros de Once y Flores tendrán su propio espacio de comercialización

Un avance interesante que pone fin a la comercialización ilegal callejera. Alivio en algunos barrios y la disconformidad de los puesteros del otro lado.

Más de mil puesteros de las zonas de Once y Flores serán reubicados en un predio cerrado donde podrán comercializar abiertamente sus productos.

El objetivo del Gobierno de la Ciudad es poder liberar las avenidas Avellaneda, Pueyrredón y Corrientes, actualmente colapsadas por los manteros.

Sin embargo los puesteros manifestaron su rechazo a la propuesta del Gobierno y hasta no ser desalojados por la policía federal aseguraron no abandonaran sus puestos.

Si bien la reubicación constituye un cambio para los negociantes no repercutirá negativamente en el negocio debido a que el traslado será en una zona cercana a donde actualmente tienen los puestos ilegales.

Un total de 3300 ya aceptaron la oferta y se trasladaran en estos días al nuevo espacio de comercialización, donde compartirán con los demás vendedores callejeros el predio.

La iniciativa representa un avance en la organización comercial y el control de la venta ilegal callejera. También, desde el Gobierno de la Ciudad manifestaron que prevén crear un registro de comerciantes con el fin de regular la situación.

La disconformidad de algunos comerciantes pasa por las quejas respecto al lugar cerrado que los aleja de la gente que trascurre habitualmente por las calles.

Sin embargo los vecinos y locales comerciales legales que habitúan la zona mostraron su alegría luego de varios años de lucha contra esta problemática que disculpaba el paso por las veredas y ocasionaba una competencia desigual con los negocios de la zona de reconocimiento oficial.

El lugar de traslado de los manteros de la zona once, es un predio de dimensiones enormes con capacidad para varios puesteros ubicado sobre la mano izquierda de la calle Perón.

Los manteros del barrio de Flores, sin embargo serán reubicados en un galpón enorme que funcionará como shopping en las intercesiones de las Avenidas Nazca y Avellaneda.

Esta es una de las zonas que mayor dificultad presenta. Hace años los vecinos de Flores vienen denunciando la inutilidad de los carriles que son actualmente tapados por los puestos de fin de semana obstruyendo el tráfico..

Desde el Gobierno de la Ciudad manifestaron que el objetivo no es dejar sin puesto de trabajo a nadie sino reubicarlos en puntos estratégicos de la Ciudad , en cercanías a sus antiguos lugares de comercialización y aprovechar así zonas inutilizadas.

La situación de los manteros que no quieren irse prevé conflictos nuevamente como en 2014 que hubo marchas y protestas. Sin embargo intentarán negociar pacíficamente para lograr concesiones afortunadas para ambos sectores.

La policía metropolitana se encargará de controlar la zona para que luego del desalojo los sitios no vuelvan a ser ocupados.