rostro

Según la ciencia los más infieles y las más fogosas serían…

Resulta que un estudio científico social determinó la predisposición a la infidelidad y al erotismo según las facciones de la cara. Un interesante informe que revela las curiosidades más sorprendentes.

 

A las diferentes tipologías o etiquetas se suman una más que tiene que ver con la forma de la cara. Los rubios son fríos, las morochas son ardientes, las castañas buenas esposas, los hombres bajos son más familieros y una infinidad de suposiciones que tienen que ver con el aspecto físico.

Cuando creíamos que ya todo había quedado como un mito llegan los sociólogos, y un equipo de científicos que determina que las personas con cara ancha son más fogosas e infieles.

Al parecer la forma de la cara serían un indicador de cuan buenos amantes somos. Un avance científico interesante pero algo cuestionado.

Según los científicos las formas faciales anchas son más propensas a tener mayor deseo sexual que las personas con cara fina, y también resultan ser más alegres reiterativas extravagantes y sin demasiada voluntad de progreso.

Tenemos que tener en cuenta que estas son solo generalidades y como todo estudio social científico pueden existir excepciones.

El informe publicado recientemente en Archives Of Sexual Behavior argumenta estar sólidamente fundamentado en cuestiones lógicas y genéticas.

Según los científicos la medida del ancho de la cara (hasta los pómulos), el largo del rostro (desde las cejas y hasta el mentón).La investigación consistió en la revisión de antecedentes y estudios anteriores que concluían en la misma teoría de la relación estrecha entre el índice de la longevidad facial con ciertas características automáticas e inconscientes del ser humano.

No solo las cuestiones de infidelidad o apasionamiento son parte del descubrimiento sino que además el estudio científico permite determinar cuan agresiva puede resultar una persona según sus rasgos faciales.

Al parecer el ancho facial tendría relación con la exposición a los andrógenos durante los periodos iniciales del desarrollo.

En relación con esto, las diferencias sexuales en la estructura facial surgen con el inicio de la pubertad como un reflejo del aumento de la testosterona en los hombres", sostiene en un comunicado Steven Arnocky, profesor asociado de Psicología en Nipissing University, North Bay (Ontario, Canadá) y líder de la investigación. "Pero fundamentalmente estos hallazgos sugieren que las características faciales pueden transmitir información importante sobre las motivaciones sexuales humanas" agregó.

El experimento se llevo a cabo entre parejas y solteros que debieron responder un cuestionario respecto a la vida sexual de cada uno. Estos resultados fueron comparados con la medición facial que determino la similitud entre la respuesta y la longitud facial.

Así las personas con caras cuadradas y anchas tienen mayor deseo sexual que otras. Además son más propensos a tener relaciones sexuales casuales y ser infieles a sus parejas.