Finalmente la ciudad tendrá su Código Ambiental, para regular las actividades que pueden dañar al medio ambiente.

La Justicia porteña dio lugar a un Recurso de Amparo y estableció que la Ciudad de Buenos Aires, debe tener su Código Ambiental, por tal motivo ordenó a la Legislatura de la Ciudad que sancione y apruebe la normativa a la brevedad. La actual Constitución porteña de 1996, establece la  obligación del Gobierno de la Ciudad a tener un Código Ambiental, según lo previsto en el Inciso 3 del Artículo 83. Sin embargo el Distrito porteño ya dispone de su Código de Planeamiento Urbano, Código de Edificación, Código de Habilitaciones y Permisos, pero hace más 25 años que todavía no se realizó el Código Ambiental para la Ciudad.

Esta medida de la Justicia fue tomada  a raíz de una acción de amparo colectivo,  presentado por Organizaciones Socio-ambientalistas, que consideran que la ciudad está atravesando una etapa acelerada de calentamiento, ya que la temperatura máxima anual aumentó casi un grado, como consecuencia  de la destrucción de sus espacios verdes y la construcción descontrolada que suma toneladas de cemento a la ciudad.

El Código Ambiental reunirá los lineamientos constitucionales de protección ambiental para el Distrito porteño, tanto en lo que se refiere a las normas como a los procesos para reglamentarlas. Existen en la ciudad una serie de leyes que protegen al medio ambiente, una de ellas es la Ley 123 de Impacto Ambiental, que determina el derecho de los ciudadanos a gozar de un ambiente sano, para preservarlo y defenderlo en provecho de las generaciones presentes y futuras. A su vez, se estipula la preservación del patrimonio natural, cultural, urbanístico, arquitectónico, y de calidad sonora y visual. Además, la Ley de Minimización de Residuos, determina las prácticas para reducir la cantidad de residuos peligrosos, la Ley de Educación Ambiental Integral, promulgada en junio del 2021 y que promueve la responsabilidad ambiental en todos los ámbitos educativos, las leyes de control de contaminación acústica y visual.

En los próximos treinta años, gran parte de la población mundial aumentará en las ciudades del tercer mundo. A medida que las poblaciones crecen, la calidad del ambiente urbano comienza a cobrar un rol cada vez más importante. Los factores de riesgo ambiental están relacionados directamente con enfermedades que deterioran la salud de las personas. La contaminación ambiental provoca infecciones respiratorias, cáncer de pulmón y enfermedades cardio-pulmonares, el plomo que se puede encontrar en todas partes del medio ambiente, aire, suelo y agua, afecta el desarrollo psicomotriz, alteraciones de conducta y trastornos de aprendizaje en los niños. La contaminación sonora provoca fuertes dolores de cabeza y pérdida de audición,  y la radiación ultravioleta puede causar cáncer de piel. Por último, el material particulado (MP) presente en el aire que respiramos, puede provocar asma, enfermedades pulmonares, y el cambio climático está relacionado a enfermedades diarreicas, malaria, lesiones no intencionales y malnutrición proteica.