A los ochenta años este inmenso bandoneonista, compositor, director, arreglador, docente, comenzó su gira infinita, celestial. Nació en la ciudad bonaerense de Chacabuco un 3 de enero de 1936. Humilde, generoso, enamorado del "fueye", diseñó un estilo propio donde combinó de manera armoniosa pinceladas de Troilo, Gobbi, Piazzolla y Grela. Como Director de la Orquesta de Tango de la Ciudad formo varias generaciones de músicos. Alternando el cargo con Carlos García, el querido Garello transmitió su manera de hacer y sentir el tango. Tal vez recreando el sonido de aquellas orquestas protagonistas de la llamada época de oro y su evolución, desde la importancia de los arreglos personalisimos. Desde el "Sexteto" colaboró con el apoyo y lanzamiento a las nuevas voces nuestra música emblema. Compartió escenario con agrupaciones como "El Aranque" e integro el plantel docente de la Orquesta Escuela de Tango, Emilio Balcarce. Un gesto que vale más que mil palabras: dono el bandoneón de "Pichuco" que le habia regalado Zita Troilo. Con una única condición, que fuera tocado por un músico una vez por semana. Sin duda que su incorporación a la orquesta de Aníbal Troilo fue una influencia decisiva. Al tiempo se desempeñó como el arreglador oficial. En una entrevista periodística, Garello manifestó que más que un arreglador, se sentía un "instrumentador"...Ya que el propio "Gordo Troilo" era en definitiva, el que aprobaba ó no lo que él escribía... A partir de 1965, como director, actuo y grabo con reconocidos artistas de la talla de: Roberto Goyeneche, Rubén Juarez, Floreal Ruiz, Roberto Rufino, Eladia Blázquez, Edmundo Rivero, Susana Rinaldi y el cantante español Dyango, entre otros. Su obra instrumental puede disfrutarse en cuatro discos para los cuales conto con un equipo de veintisiete músicos. Algunas obras para seguir escuchando: "Che Buenos Aires", "Verdenuevo", "Che Pichín", "Pasajero del Tiempo", "Bien al mango", etc... Entre agosto de 1987 y febrero de 1988, Garello y el Poeta Horacio Ferrer escriben todos los temas de la producción discográfica denominada "Viva el Tango"... Garello es un grande con todas letras, como su humildad, y "don de gente" reconoció su espíritu Troileano. A tal punto que con toda honestidad manifestó, en más de una oportunidad, que su trayectoria no hubiera sido posible sin los años compartidos en la orquesta de "Pichuco". ¡Te vamos a extrañar!